Por qué es importante comer fruta
Existe suficiente evidencia que demuestra los efectos beneficiosos que tiene el consumo de frutas y verduras sobre la salud en las distintas etapas de la vida.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda consumir un mínimo de cinco raciones de frutas y verduras al día, ya que reduce el riesgo de desarrollar distintas enfermedades como obesidad, enfermedades cardiovasculares, algún tipo cáncer, hipercolesterolemia, diabetes tipo 2, entre otras. Este efecto beneficioso sobre la salud se debe a la presencia de ciertas sustancias, como antioxidantes, fibra, folatos, flavonoides y otros fitoquímicos.
La infancia es una época clave en la instauración de los hábitos alimentarios, por lo que es de gran importancia hacer hincapié en la promoción del consumo de frutas y verduras, que se mantengan en la edad adulta.
Muchos niños no consumen las cantidades recomendadas y para muchos padres suele ser complicado introducirlas. A continuación, os presentamos algunos consejos para incrementar el consumo de frutas y verduras en vuestros hijos.
¿Cómo incrementar el consumo de frutas y verduras en niños y niñas?
Los niños y niñas son grandes imitadores de sus padres y madres, por lo que el primer paso para que incorporen frutas y verduras es que sus padres y familiares más directos también las coman. Así pues, ¡se debe predicar con el ejemplo!
Es aconsejable que en casa haya variedad de frutas y verduras a la vista, que vuestros hijos e hijas os vean comerlas y que las comáis juntos. De este modo mostrarán más interés por probarlas. Además, es necesaria una exposición reiterada a un mismo alimento para que finalmente sea aceptado. Es por esto que aunque se ofrezca o prepare una vez una receta y no tenga éxito se debe seguir ofreciendo ese determinado alimento en otra preparación.
En esta misma línea, es clave no forzar, castigar ni premiar a los hijos e hijas para que coman los nuevos alimentos ya que será contraproducente. Para fomentar que prueben nuevas frutas y verduras éstas se deben incorporar con alimentos o recetas que ya consuman y les gusten. Por ejemplo: bañar las frutas con un poco de chocolate fundido o ofrecer las verduras dentro de una pizza o con un poco de sofrito de tomate casero. Al final, con tal de comerse el chocolate, el trozo de pizza o el sofrito acabarán probando las frutas y verduras correspondientes. Otra manera sería por ejemplo mediante una brocheta y macedonia de frutas.
Del mismo modo, puede ser beneficioso involucrar a los hijos en la compra y preparación de estos nuevos alimentos. Si están implicados en todo el proceso de elaboración de las distintas recetas serán más propensos a, como mínimo, probarlas ya que ellos mismos las habrán preparado.
En todo momento estamos hablando de recetas o preparaciones porque es muy importante, sobretodo en las verduras, no cocinarlas siempre hervidas con patata o purés. Es necesario ofrecer variedad de alimentos y variedad de recetas. ¡Volvamos a rescatar el libro de recetas de la abuela, con cantidad de preparaciones sabrosas y fáciles de preparar!
Aunque al principio pueda suponer la necesidad de pasar un poco más de tiempo en la cocina, ofrecer platos más elaborados a los hijos merece la pena y acabará siendo beneficioso para todos. Del mismo modo, es primordial que todos los miembros de la familia coman lo mismo y que no haya excepciones para nadie (excepto si hay alguna alergia, intolerancia o contraindicación).
Por último, y no por eso menos importante, también es recomendable explicarles de forma simple a los más pequeños de la casa la importancia de comer frutas y verduras para tener un buen estado de salud a corto y a largo plazo. Aunque sean niños, éstos valorarán y serán capaces de entender los mensajes, por lo que esto ayudará a fomentar un mayor consumo.
Finalmente, hay que mencionar la importancia que tiene la escuela en la promoción de hábitos de vida saludables, sin trasladar toda la responsabilidad al centro educativo. Es necesario mantener estos hábitos en el ámbito familiar para facilitar su instauración.
Recordar que siempre debemos fomentar el consumo de aquellas frutas y verduras que sean de temporada y, si es posible, de proximidad.